Letras en la oscuridad
Esta noche te escucho y suenas como yo.
Tus palabras toman sentido mientras un cigarrillo hace bailar una estela de humo en mi mano.
Acordes y arpegios desenfrenados atraviesan mis sentidos.
La música rompe las barreras, rompe los esquemas, rompe tus estúpidas clases sociales.
Escuchas rock, folk, grunge, punk, pop, pero sigues siendo el mismo humano con esa perórata clase social que tanto defiendes y destacas.
Tu clase no existe, mi clase no existe. No somos de ninguna clases.
Somos tonos, matices, etnias, animales, somos tu y yo, somos lo que tú ves en mí y yo en ti, somos padres, madres, hijos, amigos, somos todo eso, pero jamás seré una clase social, no sirvo para eso.
Seremos parte de esa clase en el aula de aquella docente que decía "solo somos flores y nada más" y que posteriormente se transformó en poesía en los oídos de su pupilo.
Tasitamente y de manera abrupta el alcohol anestesia mis manos que escriben estas letras rotas y rojizas de vino.
Letras y fragmentos de pensamientos que soslayan la locura.
Somos tres en tinta.
Somos tres acordes.
Eres tu en el silencio.
Soy yo, letras en la oscuridad.
